Vol. 1, No. 2 | Septiembre - diciembre 2019 | Páginas 111 - 132

ISSN: 2710 – 088X | ISSN-L: 2710 – 088X

Descripción: D:\Users\CIDE\LOGO REVISTA.jpg

 

Integración familia y escuela en Educación Inicial a favor del proceso de aprendizaje de los niños

 

Family and school integration in early education in favor of the children's learning process

 

Iris Ferrer

irisferrer19@gmail.com

Código ORCID: 0000-0002-0194-1537

 

Centro de Educación Integral Inicial Calixto Suárez Gómez, Venezuela

 

Recibido junio 2019

Arbitrado julio 2019

Publicado septiembre 2019

 

Resumen

El presente trabajo tuvo como propósito determinar el nivel de integración de los padres y representantes con la escuela para promover el proceso de aprendizaje de los niños de 4 a 6 años. Se empleó la metodología cuantitativa y el diseño de la investigación fue el de una investigación de campo de carácter descriptivo. La institución seleccionada fue el Centro Educativo Integral Calixto Suárez Gómez, ubicado en Los Jardines de El Valle, Caracas. La muestra estuvo integrada por veinticinco (25) padres y representantes de la sección H. Entre los resultados se encontró que los padres delegan la responsabilidad del aprendizaje solo a los maestros. No existe un compromiso para ayudar a sus hijos con las actividades que propone la escuela. Todo esto trae como consecuencia la poca integración al ámbito escolar. De allí que con estos resultados se podrán diseñar estrategias, a favor de un mejor aprendizaje de sus hijos.

 

Palabras clave: Educación Inicial, integración, padres y representantes, escuela, proceso de aprendizaje

 

Abstract

The purpose of this work was to determine the level of integration of parents and representatives with the school to promote the learning process of children from 4 to 6 years old. The quantitative methodology was used and the research design was that of a descriptive field research. The selected institution was the Calixto Suárez Gómez Comprehensive Educational Center, located in Los Jardines de El Valle, Caracas. The sample consisted of twenty-five (25) parents and representatives from section H. Among the results it was found that parents delegate the responsibility for learning only to teachers. There is no commitment to help your children with the activities proposed by the school. All this results in poor integration into the school environment. Hence, with these results, strategies can be designed in favor of better learning for your children.

 

Keywords: Initial Education, integration, parents and representatives, school, learning process

 


 

INTRODUCCIÓN

 

E

n los actuales momentos, a nivel mundial el docente es uno de los principales actores y transformadores de las comunidades donde interviene como orientador de los procesos sociales. La familia también tiene un papel trascendental como ente socializador y orientador en el proceso educativo de sus hijos; por ello la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, 2010), aboga por la articulación de la familia al contexto escolar y fundamenta esta necesidad en tres razones: (a) el reconocimiento de que los padres son los primeros educadores de sus hijos e hijas; (b) el impacto positivo que puede tener una educación temprana de calidad en el desarrollo y aprendizaje de los niños y, (c) la familia como un espacio privilegiado para lograr una ampliación de la cobertura de la educación de la primera infancia.

Por esta razón, la educación y la familia constituyen un binomio inseparable, ya que los padres por derecho natural son los primeros educadores quienes tienen esta responsabilidad; al respecto, las Naciones Unidas para la Infancia o UNICEF (1989) plantea que “el interés superior del niño debe ser el principio rector de quienes tienen la responsabilidad de su educación y orientación; dicha responsabilidad incumbe en primer término, a sus padres…” (p. 19). Por lo anterior, una de las mayores dificultades para los maestros es lograr la correspondencia de este inseparable binomio que conforma la familia y la educación para la integración y colaboración al proceso de aprendizaje de sus hijos.

Es importante que el grupo familiar comprenda su valioso aporte para lograr la verdadera integración entre la comunidad, la escuela y la familia en el desarrollo social, moral, emocional y cognitivo de sus hijos y representados.

Los padres y representantes como los seres más cercanos al niño y la niña ejercen una poderosa influencia en el óptimo aprendizaje y desempeño de sus hijos en la escuela; pues ellos deben propiciar estímulos a sus descendientes desde los primeros años de vida y en toda la escolaridad para lograr potenciar las variadas capacidades cognitivas de sus hijos y representados.

De acuerdo con las ideas señaladas, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) establece en su artículo 76 lo siguiente:

 

El padre y la madre tiene el deber compartido e irrenunciable de criar, formar, educar, mantener y asistir a sus hijos o hijas, y estos o estas tienen el deber de asistirlos o asistirlas cuando aquel o aquella no puedan hacerlo por sí mismos o por sí mismas. La Ley establecerá las medidas necesarias y adecuadas para garantizar la efectividad de la obligación alimentaria. (p. 190)

 

Esto es que solo los padres son los responsables de la educación, crianza, alimentación y formación de sus hijos; por ende, los maestros solo son una guía y apoyo en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Si esto llegará a concretarse existiría una verdadera transformación social en el ámbito educativo. Si cada padre asumiera la responsabilidad que le corresponde, según lo establece la Constitución y según la esencia de ser procreador, la labor del docente estaría mejor orientada hacia la adquisición de conocimientos necesarios para la vida de sus alumnos y se podría contar con una mejor sociedad.

Igualmente, en el artículo 5, párrafo 4 de la Ley Orgánica de Educación (2009), se establece que la educación debe ser: “una práctica social efectiva de relaciones de cooperación, solidaridad y convivencia entre las familias, la escuela, la comunidad y la sociedad, que le facilite las condiciones para la participación organizada en la formación, ejecución y control de la gestión educativa” (p. 8). De aquí, se deduce que la práctica de los valores mencionados facilita el aprendizaje del niño, ya que si se lleva a cabo y con efectividad esta triangulación la atención que se le brinde al niño será más próspera y el conocimiento más seguro y habrá mayor entusiasmo y participación de todos en el entorno que lo rodea, en pro de su ámbito educativo.

En la Ley Orgánica para la Protección del Niño y el Adolescente (2000), en el artículo 55 se expone:

 

Todos los niños y adolescentes tienen el derecho a ser informados y a participar activamente en su proceso educativo. El mismo derecho tienen los padres, representantes o responsables en relación al proceso educativo de los niños y adolescentes que se encuentren bajo su patria potestad, representación o responsabilidad. (p. 101)

 

Fundamentado en las leyes mencionadas, el Curriculo de Educación Inicial (Ministerio de Educación, 2005) expresa que la familia es “el grupo primario que atiende y acompaña al niño y la niña en su hogar y que satisface sus necesidades de alimentación, salud, conocimiento, seguridad juego y afecto” (p. 23); por lo tanto, es fundamental tener siempre presente que los padres y representantes como grupo primario son los primeros escoltas de la educación de sus hijos y representados, por ende son los que proporcionan un aporte significativo al docente dentro de su praxis diaria como eje mediador del aprendizaje de este grupo etario a la institución, con el fin de facilitar y desarrollar sus competencias.

Se requiere de mucho empeño y trabajo de los padres y representantes para que se integren de manera armónica y deliberada al proceso de aprendizaje de sus hijos y, posteriormente a la vida dentro de la escuela, en pro de establecer compromisos, buena comunicación y relaciones institucionales para el fortalecimiento de la triangulación familia, escuela y comunidad.

En el contexto escolar, se ha observado que una de las mayores dificultades para los docentes es lograr la integración y colaboración del núcleo familiar en el proceso de aprendizaje dentro de la educación de sus hijos; las maestras reiteradamente acuden a los padres para compartir y dialogar acerca de los problemas que presentan sus hijos en la escuela, pero en la mayoría de los casos no encuentran respuestas exitosas, ya que en ocasiones, los mismos creen que el docente es el que tiene el deber y el derecho de realizar todo lo referente en la educación de sus hijos y, por ende, contribuir con el desarrollo de su proceso de aprendizaje.

Partiendo de lo anterior, es importante destacar, que la ayuda de los padres y representantes en el hogar pareciera muy poca o casi nula, dejando a los niños prácticamente solos en su proceso de aprendizaje, asignando la responsabilidad total al docente de turno, negándose la oportunidad de compartir una de las etapas más importantes como lo es la Educación Inicial que es la base fundamental para el éxito en sus estudios; porque desde esta etapa, se orienta y promueve el desarrollo integral entre los niños con sus pares, con su familia, con su entorno o comunidad y finalmente con los maestros, que va desde la gestación hasta los 6 años de vida del niño o el ingreso al primer grado.

Por su parte, Rojas (2006) señala que “la educación de los niños y las niñas en general es responsabilidad de los padres quienes dirigen el proceso de educación conjuntamente con la escuela” (p. 94). Por ello, los responsables directos de la educación del niño y la niña son los padres, ellos deberían guiar ese proceso con apoyo de la escuela desde el punto de vista afectivo como grupo social que orienta el hecho educativo como un objeto inherente a sus intereses. Los niños en la etapa de Educación Inicial requieren que sus padres les proporcionen amor, cariño y confianza para reforzar y lograr su interacción con todo lo que lo rodea y así poder desenvolverse con seguridad en la vida.

Pernalete (2005) señala que “los padres deben participar en todo el proceso educativo, desde el diagnóstico de las necesidades de la escuela hasta su actuación para solucionar muchos problemas, deben estar íntimamente relacionados con lo que sucede en su medio” (p. 3). Lo anterior expresa que los padres y representantes desde el momento en que inscriben a los niños en la escuela pasan a ser corresponsales de todo lo que implique el proceso educativo de estos, desde la planta física del plantel hasta el aprendizaje de sus representados.

De allí que por la autora formar parte del personal del Centro Educativo Inicial Nacional (CEIN) Calixto Suárez Gómez, ubicado en el Distrito Capital, Municipio Libertador, parroquia El Valle, Los Jardines del Valle se haya seleccionado este para realizar la investigación, la cual tuvo como objetivo determinar el nivel de integración de los padres y representantes con dicho centro educativo para promover el proceso de aprendizaje de los niños de 4 a 6 años. (Ferrer, 2014)

 

Educación Inicial

La Educación Inicial es la primera etapa de la Educación Bolivariana y está dirigida a la población entre 0 y 6 años o hasta su ingreso al primer grado de Educación Básica, con el fin de garantizar una educación integral de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y de oportunidades; a través de la atención convencional y no convencional, con la participación de la familia y la comunidad (Ministerio de Educación, 2005).

Para Sánchez (2000) la Educación Inicial tiene como misión la atención integral de los niños de 0 a 6 años de vida, donde el inicio de su escolaridad se convierte en un factor determinante para la historia escolar y personal futuro del individuo. Se administra en dos niveles: una maternal, para niños y niñas desde la gestación hasta cumplir los tres años y la fase preescolar, dirigida a la población de tres a seis años.

El nivel preescolar, donde se desarrolla la presente investigación, se orienta a los niños desde los 3 años hasta cumplir los 6 años o hasta su ingreso a primer grado de Educación Básica.

En el nivel de Educación Inicial y específicamente en la etapa preescolar donde se realiza el presente estudio es fundamental considerar el desarrollo y el aprendizaje como elementos intrínsecos de la acción pedagógica tanto dentro del entorno escolar como en la familia de los educandos.

El Currículo de Educación Inicial (Ministerio de Educación, 2005) plantea la concepción del conocimiento como “la acción del acervo o subjetividad en la construcción del objeto, como la particular perspectiva del sujeto, derivada de su ubicación en un entorno ecológico, histórico y social desde donde se construye ese saber” (p. 39-40). El aprendizaje activo es el principal medio por el cual niños construyen el conocimiento, este se da a través de un proceso social de interacción en el cual la presentación de un ambiente de apoyo interpersonal es necesario para que pueda tener libertad de manipular materiales, hacer elecciones, tomar decisiones, conversar y reflexionar acerca de lo hace.

 

La familia

Diversas corrientes tanto psicológicas, sociológicas como educativas afirman que la familia es la base de la sociedad a la cual se le asigna el deber de velar por el bienestar de todos sus miembros y de satisfacer sus necesidades económicas, sociales, emocionales y educativas, también se dice es una unidad básica del desarrollo y crecimiento, donde el niño encuentra su identidad y pasa de una situación de dependencia, especialmente de su madre, en los primeros años de su vida, hasta convertirse en un ser independiente (Gordon, 1994). De allí que el concepto tradicional de familia es el lugar donde puede encontrase el amor, comprensión y el apoyo, aun cuando todo lo demás haya fracasado, es el lugar donde podemos recuperar el aliento y sacar nuevas energías para enfrentar mejor el mundo exterior.

Siguiendo las ideas anteriores, la familia parte de la base de “que los padres y representantes son los primeros maestros de los niños ya que antes de que estos se inicien en el preescolar ya han recibido y procesado una increíble cantidad de información y dominado una amplia variedad de habilidades complejas” (Gordon, 1994, p.18). En el proceso de socialización, la familia tiene un papel fundamental en el cuidado y la crianza de los hijos y, principalmente en la transmisión de conocimientos, valores y costumbres, así como en el desarrollo de las habilidades emocionales y sociales que facilitan su adaptación para integrarse a la sociedad como personas activas y productivas.

Por tanto, la familia es un núcleo social y el primer sistema de formación del individuo, que influye de manera particular, en las interrelaciones con las otras estructuras sociales que conforman la sociedad: la comunidad, la iglesia, la escuela, entre otras, que se transforman constantemente de acuerdo a sus características y sus condiciones socioculturales. (Campabadal, 2001)

Por otra parte, se puede afirmar, que a través de la historia han existido diferentes formas de unión entre los seres humanos, los que dieron origen a la familia actual, la cual se han conformado de diferentes formas, según las características del contexto social y económico de cada época histórica, se pueden establecer los diferentes tipos de familia: familia nuclear, familia extensa, familia mixta especial y familia uniparental (Flores y Rodríguez, 2000).

Es oportuno mencionar, que los cambios que se producen al interior de las estructuras de las familias generan modificaciones no solo en las interrelaciones personales y sociales, sino también en la conceptuación de lo que es una familia, pasando desde una visión tradicional, unión de padres biológicos y sus hijos, a una perspectiva más amplia, en la cual se incluyen en el núcleo familiar a otros miembros, según sus necesidades socioeconómicas y contextos en que se desarrollan.

Por lo tanto, la familia es el ambiente idóneo para que los miembros que la conforman adquieran las habilidades individuales y sociales necesarias para su integración personal y social.

Cabe agregar, que la función primordial que debe cumplir la familia y se hace hincapié en este trabajo es la educativa, porque


el núcleo familiar es el primer medio de formación para sus miembros ya que propicia la formación de valores, actitudes y destrezas fundamentales para que los ciudadanos se integren y adapten a la sociedad en la que se desenvuelven.

Por todo lo dicho, el paradigma en el cual se inserta la Educación Inicial es el desarrollo humano, como un continuo para la adquisición de nuevos conocimientos y el despliegue de las habilidades necesarias en las áreas: cognoscitivas, social, afectivo y psicomotor donde cobra importancia el apoyo de la familia como un aspecto determinante en el proceso de enseñanza y aprendizaje en el nivel de preescolar.

El presente estudio busca que se dé un acercamiento entre la familia y la escuela a partir del diagnóstico que se hizo, el cual generará el diseño de un conjunto de estrategias instruccionales que permitan un mejor rendimiento académico de los niños y una oportuna orientación a los padres y representantes para que se hagan partícipes del proceso de aprendizaje de sus hijos y/o representados.

 

Integración familia, escuela y comunidad

La palabra integración tiene su origen en el concepto latino integratio. Se trata de la acción y efecto de integrarse (www.dle.rae.es). Esto es que la integración se define como un proceso de participación activa de todos y cada uno de los miembros que conforman determinadas comunidades para estrechar vínculos y relaciones afectivas con otras asociaciones u organismos similares que permiten bienes sociales que beneficien abiertamente a un colectivo común.

Por otra parte, Centeno (2005) señala que la integración “es la apertura permanente hacia la unión de un entorno especifico con otros entornos similares, para realzar en todo momento las bondades y las experiencias que conlleven a la formación de una sola identidad” (p. 5).

Es preciso poder reconocer la integración en diferentes ámbitos ya que tiene una amplia importancia, tales como: integración social, integración económica, integración familiar, entre otras. Siendo la integración familiar el caso que ocupa a la presente investigación.

Es a la familia como la unidad básica del desarrollo y crecimiento del niño a la que le corresponde buscar los medios y estrategias para integrarse a las distintas actividades que planifica y ejecuta la escuela para llevar a cabo su rol en la comunidad. Es importante que los padres y representantes comprendan su papel protagónico y puedan estar informados de las actividades que se realizan en la jornada diaria dentro del aula de preescolar. En tal sentido, la decisión será más fácil si los padres y representantes tienen un conocimiento real de las habilidades y necesidades de sus hijos, estén informados que les ofrece la escuela e identifiquen sus inquietudes, necesidades, habilidades y capacidad de compromiso en el proceso educativo (Brine, 2008).

Por lo tanto, la familia es un factor determinante en el desarrollo armónico y coherente del niño en edad preescolar; el compromiso de la familia en las actividades escolares debe ser ineludible, pues a ella le corresponde la responsabilidad de educar y a la escuela de reforzar.

Por su parte, la escuela forma parte vital de la comunidad, por cuanto ambos son escenarios de participación y de aprendizaje colectivos, la integración escuela, familia y comunidad supone considerar a los distintos elementos, sujetos y actores socio-educativos involucrados en el proceso de formación humana, tomando en cuenta para ello, la participación de la comunidad educativa, y la comunidad del entorno.

Al respecto, Centeno (2005) sostiene que la integración escuela- comunidad:

 

Representa un factor primordial para abrir el espacio común de participación donde la familias, la comunidad, padres y/o representantes, docentes y alumnos se integran para formar parte del proceso de formación que se ha decidido asumir en una determinada institución. (p. 8)

 

Cabe destacar entonces, que la escuela en teoría se manifiesta como una fuente de participación comunitaria, lo que posibilita un desarrollo educativo y socio-comunitario, esto significa, que la comunidad al estar presente en las actividades educativas de la escuela, también podrá hacer uso racional del plantel y del entorno como forma de organización y producción de bienestar social y colectivo.

Para Bolseguí, Goncalves, Moncada, Rodríguez y Vivas (2006) a la escuela le corresponde además de educar al niño, extender su acción a la familia, desplegando estrategias y acciones concretas que permitan a los padres y representantes adquirir herramientas y conocimientos que les ayuden a educar a sus hijos. Tanto padres, representantes y docentes son los actores para lograr el ideal educativo que persigue la escuela y, cuyo fin último, es la búsqueda de la realización personal del educando.

En este sentido, es importante destacar que la integración de la familia, la escuela y la comunidad deben partir de las necesidades, problemas y aspiraciones de sus habitantes; siendo muy importante la participación de la familia en todo el proceso, desde el diagnóstico de sus necesidades hasta la actuación para transformar su situación. Se supera así la visión de que la escuela es la única responsable del proceso educativo y se proyecta como un proceso que es corresponsabilidad de la familia, escuela y comunidad.

La participación de los padres y representantes en la escuela es un asunto importante, siempre se ha buscado que los padres y representantes se involucren en las diferentes actividades desarrolladas por la institución educativa, ya sean ayudando con las tareas en el hogar, como en la participación de los eventos propuestos en el mismo, favoreciendo estas con el fortalecimiento en el desarrollo y educación del niño y la niña (Cuevas, 2007).

Padrón (2002) expresa que “la participación de los padres y representantes está sujeta a la forma como está organizada la comunidad, la capacidad de cooperación de sus integrantes depende del grado de motivación , sentido de pertenencia, claridad en el planteamiento de su misión y el ejercicio de los deberes y derechos ciudadanos”. (p. 76). Desde este punto de vista la participación es una herramienta por excelencia para el ejercicio de una democracia sana y amplia donde todos los actores del hecho educativo compartan responsabilidades.

Para que produzca la integración de la familia a la escuela existen dos principios fundamentales, según Ramírez (2003):

 

Principio de horizontalidad: es la relación entre iguales. Este debe entenderse como “una relación compartida de actitudes, responsabilidades y de compromisos hacia logros y resultados exitosos” (Ramírez, 2003, p. 33).

Principio de participación: se entiende como el proceso formativo donde todos los involucrados aportan valiosas ideas y es su deber colaborar en la planificación, ejecución y evaluación en lo referente al proceso de enseñanza y aprendizaje (Ramírez, 2003).

 

Por tanto, la escuela debe buscar los mecanismos o estrategias necesarias para incorporar a los padres y representantes en el proceso de formación integral de sus pequeños, donde se concentren los esfuerzos en pro del bienestar académico de los niños.

 

MÉTODO

 

D

e acuerdo con el problema planteado, el referido estudio se enfoca bajo el paradigma cuantitativo ya que permitió recolectar datos cuantificables que se pueden describir en relación con el nivel de integración de los padres y representantes en el proceso de aprendizaje de los niños y niñas de Educación Inicial.

Para Briones (1996) la investigación de tipo cuantitativa se fundamenta a través de registros descriptivos, trata de conocer las interrelaciones que operan en el problema, afirma que la investigación cuantitativa es, “cómo una categoría de diseño de investigación que extraen descripciones a partir de observaciones que adoptan la forma de entrevista, narraciones notas de campo, grabaciones entre otras”(p. 31).

El diseño se fundamentó en una investigación de campo de carácter descriptivo. En este tipo de diseño el investigador está en contacto con la información que toma de la realidad observada. (Farci y Ruiz, 2007).

La población de la presente investigación estuvo conformada por los padres y representantes del Centro Educación Inicial Calixto Suárez Gómez, ubicada en Los Jardines de El Valle que tengan educandos inscritos entre 4 y 6 años de edad. Existen cinco (5) secciones de 25 alumnos, en el turno de la tarde; esto da un total de 125 padres y representantes que conforma la población.

Palella y Martíns (2004) definen la población como el conjunto de unidades de las que se debe obtener información, conjunto finito o infinito de elementos, personas o cosas pertinentes a una investigación, generalmente inaccesible.

La muestra se obtuvo de las cinco secciones. De la cual se seleccionó a la Sección H, por ser la investigadora la docente de dicha sección. Esta estuvo integrada por 25 alumnos, por lo tanto, se contó con veinticinco (25) padres y representantes. Según Sudman (como se citó en Hernández, Fernández y Baptista, 1998), la muestra “suele ser definida como un subgrupo de la población” (p. 134)

Para esta investigación, se utilizó como técnica una encuesta, la cual fue aplicada a los padres y representante y como instrumento un cuestionario que funciona como el instrumento de la técnica de la encuesta.

Para Sabino (2000), la encuesta es una forma “de requerir información a un grupo socialmente significativo de personas acerca de los problemas de estudio para luego, sacar conclusiones que se correspondan con los datos recogidos” (p. 155). Para el mismo autor, “el cuestionario es un instrumento de recolección de datos estructurados por una listado de preguntas que se administran individualmente o en forma colectiva” (p. 168).

El cuestionario que fue diseñado y validado se aplicó a manera de a los padres y representantes. Este constó de 12 ítems; las respuestas fueron dispuestas para ser respondidas en función a la escala de frecuencia siguiente: Siempre, casi siempre, algunas veces, casi nunca y nunca.

El procedimiento que se siguió para lograr los objetivos propuestos permitió que se estableciera un contacto inicial con los padres, a fin de conocerlos y captar la posible muestra para la investigación. Después de validado el instrumento, se aplicó, con la finalidad de conocer cuál es el nivel de integración que cada uno de ellos demuestra en la escuela para con su hijo.

 

RESULTADOS

 

A

 continuación se presentan los resultados que se derivaron de la aplicación del cuestionario a la muestra seleccionada. Cabe destacar que el tratamiento se llevó a cabo analizando de manera individual las tablas de distribución de frecuencia y las figuras correspondientes a cada ítem o reactivo incluido en las 12 preguntas del cuestionario.

 

Ítem 1. Está dispuesto a contribuir positivamente en la formación de la personalidad de sus hijos

Se puede observar que el 64% de los padres encuestados siempre están dispuestos a contribuir positivamente en la formación de la personalidad de sus hijos, mientras que un 36% casi siempre, lo que quiere decir, que la mayoría están conscientes de su rol para ayudar en dicha formación (ver Tabla 1). Diversas investigaciones demuestran (Levis, 1999; Centeno, 2005) que los padres tiene la responsabilidad ineludible de asistir a sus hijos en su crecimiento y desarrollo en la vida escolar.

Cuando los padres son sensatos y consecuentes de la gran responsabilidad que tienen en sus manos sobre la formación de sus hijos, les será más fácil saber guiarlos hacia lo que será mejor para ellos en un futuro.

 

Tabla 1. Distribución de Frecuencia ítem 1

ÍTEM Contribuye positivamente en el desarrollo de la personalidad de su hijo

fi

%

Siempre

16

64%

Casi siempre

9

36%

Algunas veces

0

0

Casi nunca

0

0

Nunca

0

0

Totales

25

100%

 

Ítem 2. Brinda seguridad a sus hijos

 En la Tabla 2 se muestra que el 80% de los padres y representantes siempre brinda seguridad a sus hijos y el 20% casi siempre; esto demuestra la importancia que le dan los padres a formar niños seguros y a garantizarle un desarrollo armónico y coherente en edad preescolar. El compromiso de los padres debe ser ineludible, pues a ellos le corresponde la responsabilidad de educar y a la escuela de reforzar. El contexto familiar debe brindarles a los niños en edad preescolar un ambiente de confianza, respeto y seguridad.

 En ese orden de ideas Gómez (1980) sostiene que el influir de los padres es imprescindible, el niño aprende a saber quién es a partir de su relación con sus padres, personas que les quieren, nadie puede descubrirse a sí mismo si no hay un contexto de amor y de valoración.

 

 


Tabla 2. Distribución de Frecuencia ítem 2

ÍTEM Brinda seguridad a su hijo

fi

%

Siempre

20

80%

Casi siempre

5

20%

Algunas veces

0

0%

Casi nunca

0

0%

Nunca

0

0%

Totales

25

100%

 

Ítem 3. Siente curiosidad por las actividades que realiza su hijo dentro del aula de clase

 En la Tabla 3 se muestra la frecuencia acerca de la curiosidad que sienten los padres por las actividades que se realizan dentro del aula de clase: un 12% casi siempre, un 36% algunas veces, un 48% casi nunca y un 4% nunca; puede observarse que entre los encuestados hay muy poca curiosidad por conocer cuáles son las actividades que ejecuta la maestra en el proceso de aprendizaje de sus hijos o representados. Esto evidencia que los padres delegan la responsabilidad del aprendizaje a los maestros, lo que trae como consecuencia la poca integración al ámbito escolar. Heward (1997) considera que las relaciones entre los padres y el entorno escolar favorecen una amplia variedad de actividades enfocados hacia la aplicación de diversas estrategias en el hogar para generar un mayor rendimiento académico.

 

Tabla 3. Distribución de frecuencia ítem 3

ÍTEM Siente curiosidad por las actividades que se realizan dentro del aula

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

3

12%

Algunas veces

9

36%

Casi nunca

12

48%

Nunca

1

4%

Totales

25

100%

 

 


Ítem 4. Aplica estrategias alternativas para reforzar en el hogar las actividades impartidas por la escuela

En la Tabla 4 se puede apreciar que un 16% de los padres algunas veces aplica estrategias alternativas para reforzar en el hogar las actividades impartidas por la escuela, un 40% casi nunca y un 44% nunca; esto demuestra el poco compromiso que tienen los padres para apoyar y reforzar las actividades y tareas escolares que propone la maestra de preescolar. Los padres son los que deben tener mayor interés de que sus hijos aprendan, por lo tanto deben involucrarse en las actividades escolares y extraescolares en beneficio de una educación de calidad para sus hijos. Debe buscar ayuda pedagógica por parte de la maestra, la escuela o la comunidad para ayudar en el proceso de aprendizaje y así garantiza un óptimo desarrollo cognitivo, psicomotor y emocional.

 

Tabla 4. Distribución de Frecuencia ítem 4

ÍTEM Aplica estrategias alternativas para reforzar en el hogar las actividades impartidas en la escuela

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

4

16%

Casi nunca

10

40%

Nunca

11

44%

Totales

25

100%

 

Ítem 5. Asiste a las reuniones del preescolar

Los datos acerca de la asistencia a reuniones al preescolar evidencian que un 8% siempre asisten, un 32% casi siempre, un 48% algunas veces, un 8% casi nunca y un 4% nunca (ver Tabla 5); un grupo considerable asiste a las reuniones convocadas por la docente, sin embargo, existe un porcentaje que aunque no es elevado casi nunca y nunca asisten a las reuniones convocadas ya sea por la maestra o por la institución. Es importante hacer notar, que los padres asisten a las reuniones cuando hay entrega de los informes del rendimiento académico, cuando son reuniones de carácter general, convocadas por la Dirección de la institución la asistencia baja considerablemente. Se justifican con la docente porque tiene que trabajar y en la mayoría de los casos se les dificulta el permiso para ausentarse de su entorno laboral.

 

Tabla 5. Distribución de Frecuencia ítem 5

ÍTEM Asiste a reuniones en la institución

fi

%

Siempre

2

8%

Casi siempre

8

32%

Algunas veces

12

48%

Casi nunca

2

8%

Nunca

1

4%

Totales

25

100%

 

Ítem 6. Recibe orientación del docente para darle continuidad a las actividades que se trabajan en el preescolar

Se observa en la Tabla 6 que un 72% de los padres casi nunca recibe orientación del docente para darle continuidad a las actividades que se trabajan en el preescolar, mientras que un 28% contestó que nunca; estos datos muestran claramente que es necesario que la maestra busque estrategias que permitan orientar a los padres y representantes para que estos puedan reforzar a sus hijos en el hogar. La autora del presente estudio ha podido constatar en sus años de práctica profesional que los padres se les dificultan apoyar a sus hijos en sus tareas escolares porque su grado de instrucción no se los permite.

Se evidencia entonces, que un alto porcentaje de padres y representantes requieren orientaciones, acerca de diferentes temas relacionados con el desarrollo biopsicosocial de sus hijos.

 

Tabla 6. Distribución de Frecuencia ítem 6

ÍTEM Recibe orientación del docente para darle continuidad a las actividades en el hogar

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

0

0%

Casi nunca

18

72%

Nunca

7

28%

Totales

25

100%

 

 


Ítem 7. Orienta de manera pedagógica a sus hijos

En el ítem 7 el 12% de los padres respondió que algunas veces orienta de manera pedagógica a sus hijos, el 52 casi nunca y el 36% nunca lo hace (ver Tabla 7); se puede evidenciar que un porcentaje elevado de estos padres no poseen las herramientas y estrategias pedagógicas para ayudar a sus hijos con las actividades escolares que propone la escuela. De allí la relevancia de este estudio al proponer un conjunto de estrategias instruccionales que permitan de manera gradual la motivación e interés para que los padres conozcan y se involucren en las actividades que planifica el preescolar.

Es importante hacer notar, que la docente de esta investigación hizo una revisión de los datos que se encuentran en la institución, constatando que el nivel académico de los padres en su mayoría no llegaron a culminar el bachillerato.

 

Tabla 7. Distribución de Frecuencia ítem 7

ÍTEM Orienta de manera pedagógica a su hijo

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

3

12%

Casi nunca

13

52%

Nunca

9

36%

Totales

25

100%

 

Ítem 8. Dedica tiempo a complementar con sus hijos las actividades de la escuela

En la Tabla 8 se puede observar que el 68% de los padres algunas veces dedica tiempo a complementar con sus hijos las actividades de la escuela, mientras que un 12% casi nunca y un 20% nunca lo que pone en evidencia que es necesario incorporar a los padres al trabajo que lleva a cabo la maestra y la institución en el proceso de aprendizaje de sus hijos y representados. Los padres son los pilares y responsables de la formación y desarrollo de sus hijos, por lo tanto tienen la obligación de buscar el tiempo y el espacio para acompañar a sus niños en su proceso de aprendizaje. Por lo tanto, la maestra debe aplicar estrategias significativas donde participen padres y representantes para que se integren a las diferentes actividades planificadas por el preescolar.

 

Tabla 8. Distribución de Frecuencia ítem 8

ÍTEM Dedica tiempo a complementar con su hijo las actividades de la escuela

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

17

68%

Casi nunca

3

12%

Nunca

5

20%

Totales

25

100%

 

Ítem 9. Interviene de manera activa en el proceso de aprendizaje de sus hijos

Se puede apreciar la Tabla 9 que 12% de los padres y representantes casi siempre intervienen de manera activa en el proceso de aprendizaje de sus hijos, mientras que un 40% algunas veces, un 32% casi nunca y un 16% nunca, estos datos expresan la poca intervención de los padres en el proceso de aprendizaje de sus hijos. La institución y los docentes deben planificar un trabajo compartido con los padres y/o representantes de preescolar a fin afianzar el proceso de aprendizaje. Para Bolseguí et al. (2006) es necesaria la planificación de talleres, charlas, conversatorios y reuniones con los padres y representantes que le permita involucrarse en el proceso de aprendizaje de sus hijos.

 

Tabla 9. Distribución de Frecuencia ítem 9

ÍTEM Interviene de manera activa en el proceso de aprendizaje de su hijo

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

3

12%

Algunas veces

10

40%

Casi nunca

8

32%

Nunca

4

16%

Totales

25

100%

 

Ítem 10. Siente que forma parte importante del ámbito escolar de su hijo

Los datos anteriores expresan que un 16% casi siempre forma parte importante del ámbito escolar de su hijo, un 12% algunas veces, un 36% casi nunca y un 36% nunca (ver Tabla 10); se observa que un número considerable de ellos no se siente que forma parte importante en la institución donde educan a sus hijos, se puede inferir que esto se debe a la poca integración hacia el contexto escolar.

Uno de los propósitos de este estudio es el establecimiento de relaciones entre padres, representantes y la escuela, donde ellos perciban la escuela como suya, la que puede contribuir a prepararlos para resolver los problemas de sus interacciones familiares, de la educación de sus hijos y otros aspectos de su formación y así, cumplir con éxito la responsabilidad personal y social que encierra educar al ciudadano del futuro (Gómez, 1980).

 

Tabla 10. Distribución de Frecuencia ítem 10

ÍTEM Siente que forma parte importante del ámbito escolar de su hijo

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

4

16%

Algunas veces

3

12%

Casi nunca

9

36%

Nunca

9

36%

Totales

25

100%

 

Ítem 11. Colabora en la planificación, ejecución y evaluación del proceso de enseñanza – aprendizaje de su hijo

Los datos anteriores arrojan que un 16% casi nunca colabora en esta tarea y un 84% nunca lo hace (ver Tabla 11); es evidente que estos no se involucran con los aspectos administrativos del proceso de enseñanza aprendizaje de sus hijos. Esto se debe a que la escuela no propicia espacios de integración para que los padres participen de estos procesos.

Es pues imperiosa la integración de la familia al contexto escolar, por cuanto ambos deben mantener de una comunicación constante que les permita realizar un trabajo mancomunado en beneficio de un desarrollo integral de los niños y por ende en el proceso de aprendizaje.

Para Brine (2008) la escuela forma parte vital de la comunidad, es escenario de participación y de aprendizaje colectivos, la integración escuela, familia y comunidad que contribuya en el proceso de formación humana, tomando en cuenta para ello, la participación de la comunidad educativa, y la comunidad del entorno.

 

Tabla 11. Distribución de Frecuencia ítem 11

ÍTEM Colabora en la planificación, ejecución y evaluación del proceso de enseñanza – aprendizaje de su hijo

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

0

0%

Casi nunca

4

16%

Nunca

21

84%

Totales

25

100%

 

Ítem 12. Participa activamente en las actividades escolares y extraescolares

En la Tabla 12 se evidencia que un 12% algunas veces participa activamente en las actividades escolares y extraescolares, un 40% casi nunca y un 48% nunca, se muestra claramente en los datos aquí expresados la poca participación e integración de los padres y representantes en el trabajo escolar que lleva la institución de preescolar. Se reitera nuevamente que la escuela y los docentes deben propiciar espacios para que estos padres se involucren de manera armoniosa en dicho trabajo.

En ese mismo orden de ideas Castro (2005) sostiene que el rol del docente de preescolar es ayudar a que los padres y representantes a tomar conciencia sobre su rol y que el propósito fundamental es conocer a sus hijos, de esta manera podrán contribuir positivamente en el desarrollo de la personalidad de sus hijos, brindándoles seguridad y de esta manera aumenten su autoestima y autonomía, entre otros.

 

Tabla 12. Distribución de Frecuencia ítem 12

ÍTEM Participa activamente en las actividades escolares y extraescolares

fi

%

Siempre

0

0%

Casi siempre

0

0%

Algunas veces

3

12%

Casi nunca

10

40%

Nunca

12

48%

Totales

25

100%

 

 


CONCLUSIONES

 

L

os padres son los pilares y responsables de la formación y desarrollo de sus hijos, por lo tanto tienen la obligación de buscar el tiempo y el espacio para acompañar a sus niños en su proceso de aprendizaje. Por lo tanto, la maestra debe aplicar estrategias significativas donde participen padres y representantes para que se integren a las diferentes actividades planificadas por el preescolar.

Los resultados de esta investigación permitieron determinar cómo debe ser la integración de padres y representantes al ámbito escolar para promover el proceso de aprendizaje en niños entre 4 y 6 años de edad, del Centro Educativo Integral Calixto Suárez Gómez, donde se evidenció que hay muy poca curiosidad por conocer cuáles son las actividades que ejecuta la maestra en el proceso de aprendizaje de sus hijos o representados. Esto evidencia que los padres delegan la responsabilidad del aprendizaje a los maestros, lo que trae como consecuencia la poca integración al ámbito escolar. Esto también demuestra el poco compromiso que tienen los padres para apoyar y reforzar las actividades y tareas escolares que propone la maestra de preescolar. Los padres son los que deben tener mayor interés de que sus hijos aprendan, por lo tanto deben involucrarse en las actividades escolares y extraescolares en beneficio de una educación de calidad para sus hijos.

 Finalmente, esta investigación también sirvió para determinar que un porcentaje elevado de estos padres no poseen las herramientas y estrategias pedagógicas para ayudar a sus hijos con las actividades escolares que propone la escuela.

 

REFERENCIAS

 

Bolseguí, M., Goncalves, N., Moncada O., Rodríguez M. y Vivas, N. (2006). Programa de Integración Familia- Escuela a los Padres y Representantes de la Unidad Educativa José Manuel Álvarez. Investigación Revista para conocer y transformar, 11(2). Recuperado de http://www.investigacionrevistacultca.org/electro/investigacionrevistacultca%20vol%2011.pdf#page=63

Brine, M. (2008). La Relación Escuela Comunidad (tesis). Universidad Central de Venezuela, Caracas

Briones, G. (1996). Metodologia de la investigacion cuantitativa en las ciências sociales: Modulo Três. Recuperado de http://www.icfes.gov.com/cont4/fomento/pub/libros/ser_inv_soc/modulo3.pdf

Campabadal, M. (2001). El niño con discapacidad y su entorno. San José. Costa Rica: Editorial Universidad Estatal a Distancia

Castro, P. (2005). El centro de referencia latinoamericana para la Educación preescolar. Revista Candidus, No 16. Caracas: Venezuela

Centeno, Z. (2005). Integración Escuela Comunidad. Formación Para la Vida. Folletos Educativos, Caracas- Venezuela

Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (1999). Asamblea Nacional Constituyente (diciembre 30,1999)